DNI Salta.- “En casa de herrero cuchillo de palo” reza el viejo dicho que alude a la paradoja de que falten determinadas cosas en lugares donde deberían abundar. El ejemplo más claro es la posición que tomó el secretario General de ADP, Fernando Mazzone ante el conflicto docente en Jujuy.
El gremialista afín al oficialismo, conocido por su renuencia a las luchas docentes y firmar de entrada todos los acuerdos del gobierno en materia educativa, sin oponer resistencia, pese a que en la mayoría de las veces no son convenientes para el sector, se lo pudo ver campante y muy quitado de la pena en la provincia vecina de Jujuy, en medio de una marcha multitudinaria “apoyando” la lucha de la docencia jujeña, mezclado como uno más del montón, arengando fervientemente cada cántico contra la injusticia educativa de nuestros vecinos.
Mazzone viene siendo muy cuestionado en la dirigencia de la ADP, incluso muchos docentes sostienen que el gremialista obtuvo el triunfo de las elecciones, realizadas en abril del año pasado, valiéndose de artilugios poco transparentes y no precisamente por su capacidad para liderar el gremio que aglutina la mayoría de docentes en Salta, pero que hoy peligra, justamente, por los desmanejos de Mazzone, causando que los maestros se autoconvoquen y decidan buscar por otros rumbos la claridad en la lucha por derechos que hoy se perdió en la figura del desgastado y obsecuente secretario.
Es propicio recordar que en todo este tiempo donde los maestros de Salta decidieron levantar la voz y ejercer el derecho a manifestarse para conseguir mejoras salariales, entre otras cosas, Mazzone decidió llamarse al silencio y silbar para un costado.
