DNI Salta.- Lo que parecía una noche tranquila en el barrio San Pantaleón, en Coronel Juan Solá (Estación Morillo), terminó en una brutal escena de violencia. Un joven de 29 años, en estado de ebriedad, irrumpió en la casa de su expareja pasadas las 23 del domingo. Tras una fuerte discusión, la atacó con un arma blanca, provocándole al menos tres heridas cortantes.
Pero fue su hija, de tan solo 13 años, quien terminó gravemente herida. En un intento desesperado por proteger a su madre, se interpuso entre ambos y recibió ocho puñaladas, una de ellas en el tórax. Fue trasladada de urgencia al Hospital San Vicente de Paul de Orán, donde fue operada y permanece en terapia intensiva con pronóstico reservado.
La madre, en tanto, fue derivada al hospital de Embarcación con heridas de menor gravedad. El atacante fue detenido por la Policía y presentaba signos de haber forcejeado con las víctimas. La causa quedó en manos de la Fiscalía, que investiga los hechos bajo la carátula de tentativa de femicidio y tentativa de homicidio agravado por el vínculo.
El caso provocó conmoción en Morillo y encendió nuevamente la alarma por los altos índices de violencia de género en el norte salteño. Familiares, vecinos y organizaciones sociales se movilizaron para acompañar a las víctimas, mientras exigen respuestas más efectivas del Estado en zonas donde los dispositivos de protección son escasos o ineficaces.
“Está viva de milagro”, resumió una fuente cercana a la familia, que pidió respeto y contención mientras la menor pelea por su vida.