Elecciones en Salta: ganó La Libertad Avanza en Capital y creció el voto en blanco en toda la provincia

DNI Salta.- Las elecciones provinciales en Salta dejaron un escenario político complejo y una fuerte señal de descontento ciudadano. La participación fue baja a nivel general —apenas 58,76%— y el voto en blanco se consolidó como una expresión significativa, incluso alcanzando el tercer lugar en algunas categorías.

En la ciudad de Salta, el distrito más importante, votó el 62,55% del padrón. Allí, el voto en blanco alcanzó el 7,23%, superando a fuerzas tradicionales como el Frente Justicialista Salteño. En Diputados, incluso quedó por encima de Juntos, reflejando un desencanto notorio con la oferta electoral.

El oficialismo provincial, encabezado por el gobernador Gustavo Sáenz y el intendente Emiliano Durand, sufrió una derrota histórica en Capital. Por primera vez en diez años, el espacio perdió la ciudad, a pesar de haber dividido su fuerza en dos listas: Vamos Salta y Unidos por Salta. En conjunto, ambas apenas superaron el 27% frente al 34% obtenido por La Libertad Avanza, que logró un sorpresivo triunfo.

En contraste con Capital, otros departamentos mostraron realidades opuestas. La Poma lideró la participación con un 81,08%, seguida por Chicoana y Guachipas. En el otro extremo, Orán registró la tasa más baja con solo 46,54%, y en Aguas Blancas apenas votó el 24,64% del padrón.

El voto en blanco, presente en todos los departamentos, alcanzó picos en Cerrillos (7,57%) y Rosario de Lerma (5,56%). Los niveles más bajos se observaron en La Poma e Iruya, con apenas 1,4%.

El resultado también evidenció el retroceso de otras fuerzas. El kirchnerismo, sin estructura ni candidatos competitivos, fue prácticamente irrelevante. El PRO tampoco logró posicionarse, y no consiguió ingresar concejales ni diputados en la capital.

A nivel legislativo, el oficialismo puso en juego 30 bancas y logró retener 20. Aunque el gobernador celebró el resultado por conservar los dos tercios en la Cámara de Diputados, el revés en la capital y la pérdida de apoyo fueron notorios.

El fenómeno del voto en blanco y la baja participación abren interrogantes sobre la relación entre la política y la ciudadanía en Salta. Mientras algunos analistas hablan de apatía, otros apuntan a una desconexión entre las propuestas partidarias y las demandas reales de la sociedad.