DNI Salta.- En una sentida homilía desde la cima del cerro San Bernardo, el arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello, ofreció un mensaje cargado de crítica social y reflexión espiritual, al culminar el recorrido del Vía Crucis junto a cientos de fieles.
Desde el pie de la cruz que bendice a la ciudad desde 1901, Cargnello advirtió sobre la crisis de valores que atraviesa la sociedad actual, con eje en la desintegración familiar, la cultura del facilismo y el avance de las adicciones, incluso en niños:
“¿Por qué chicos tan chicos se meten en el mundo de la droga? La droga atraviesa todas las clases sociales y está destruyendo la sociedad”, alertó.
También lanzó un fuerte llamado a la clase política, a la que criticó por sus constantes disputas:
“Parece que se pelean como si cada uno tuviera la vara mágica para solucionar los problemas… y no es así. Nos devoramos entre nosotros”, expresó.
Fe e identidad
Frente a este panorama, el arzobispo sostuvo que la cruz representa el ancla que sostiene al creyente, y destacó que la fe en Cristo es la clave para reencontrar el sentido de la vida:
“Ningún ser humano es cualquiera. Puede que tus padres no te hayan querido, pero Dios sí. Si naciste, es porque Él te amó desde siempre”.
Llamó a recuperar la identidad cristiana y advirtió sobre el vacío existencial que enfrentan muchos jóvenes:
“Hoy muchos chicos buscan su identidad en etiquetas, en pertenecer a colectivos… pero primero sos hijo, sos persona, sos de la familia de Dios”.
Un mensaje por la paz y la vida
En sintonía con el Año Santo, Cargnello pidió trabajar por la paz en los vínculos de todos los días, y reflexionó sobre el descenso en la natalidad y la cultura que, según dijo, ha restado valor a la vida:
“Está disminuyendo el número de hijos en nuestras escuelas. Diez años de propaganda contra la vida están teniendo efecto. Eso no habla bien de un pueblo”.
La homilía concluyó con un llamado a confiar en Dios y no rendirse ante la adversidad:
“No te achiques, no te arrugues. Es un día para decirle sí al Señor”.
