DNI Salta.- Durante los últimos días, la sede de la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación en la ciudad de Salta se convirtió en escenario de una situación crítica y desgastante para cientos de personas con discapacidad y sus familias. La renovación de las pensiones no contributivas —único sustento económico para muchos— se transformó en una odisea marcada por la desorganización, la falta de personal y la ausencia total de información.
Las imágenes son elocuentes: personas desde la madrugada —algunas incluso pasando la noche en la vereda— esperando ser atendidas sin certeza alguna de lograrlo. «Vine temprano porque nunca me llegó una notificación. Es desesperante», relató una mujer a El Tribuno, mientras sostenía su termo y observaba cómo la fila se extendía hasta dar la vuelta a la esquina.
El drama se intensifica por las condiciones precarias del lugar. El horario de atención es de tan solo cinco horas (de 8 a 13), y apenas dos empleados intentan atender a la multitud. “Vengo por segunda vez para hacer el trámite de un niño discapacitado y aún no me atienden”, contó Lina Mercedes Pizan, de 70 años. “No hay turnos, ni números, ni un sistema que ordene. Todo es confusión.”
El monto de la pensión que se intenta renovar es de apenas $200.000 —alrededor del 70% del salario mínimo—, cifra que para muchos representa el único ingreso mensual. “Es lo único que tenemos para vivir”, repiten varias personas, visiblemente angustiadas ante la posibilidad de perder ese escaso pero vital recurso.
Además de la espera interminable, los presentes denuncian la absoluta falta de organización. “No hay información, todo es a los gritos y por orden de llegada. Nadie te explica nada”, lamentó otra mujer que lleva días intentando renovar su trámite sin éxito.
El reclamo principal es claro: más personal, implementación de turnos previos, horarios extendidos y un trato digno. «Esto es una humillación. No pedimos nada del otro mundo», expresó una de las tantas personas afectadas.
Hasta ahora, la Superintendencia de Servicios de Salud no emitió ninguna declaración oficial sobre la situación en Salta. En tanto, los damnificados evalúan presentar reclamos formales para exigir una respuesta urgente que garantice su derecho al acceso a un beneficio esencial, sin más maltrato ni dilaciones.